La aguja hipodérmica es un instrumento metálico en forma de tubo de pequeño diámetro, más o menos largo, con un extremo cortado a bisel, puntiagudo y afilado y con el otro provisto de un casquillo que encaja con la jeringa y que se utiliza, previamente esterilizado, para puncionar y extraer líquidos o inyectar sustancias en el organismo a través de la piel.
Se trata de un producto de un solo uso que siempre viene envasado de manera individual y estéril.
Partes de la aguja:
- Pabellón o cubo: casquillo de inserción con la jeringa. Es un pabellón e polipropileno translúcido con color identificativo del diámetro de la aguja (calibre), según la norma UNE-53-373. Se trata de un cono tipo “luer”.
- Tubo metálico: fabricado en acero inoxidable al níquel-cromo. Este materia es inerte y está recubierto con una capa de silicona que hace más suave la inserción al organismo y reduce las probabilidades de coagulación. Debe ser recto y cilíndrico, de superficie lisa y con gran rigidez para no romperse.
- Bisel: corte oblicuo en el borde. La punta de la aguja debe tener un afilado que garantice la agudeza y resistencia necesaria para una buena perforación. Se utilizan biseles largos (menor ángulo) para profundizar en los tejidos, y biseles cortos (mayor ángulo) para la punción de vasos. Las agujas convencionales constan de un triple bisel (la parte inferior del bisel está cortada formando una especie de doble bisel y con las aristas disminuidas por sendos planos que las cortan).

- Protector: pieza plástica, coloreada o no, de forma más o menos cilíndrica en cuyo interior se encuentra la aguja hipodérmica, acoplándose en su parte superior con el pabellón de la aguja, quedando fijada y protegida. Evita posibles daños en el bisel o en la aguja, a la vez que evita la posibilidad de pinchazos accidentales.
- Sistema de seguridad: la Orden 827/2005 obliga al uso de agujas de seguridad, por lo que todas las agujas deberán llevar incorporado un tipo de sistema de seguridad para prevenir pinchazos accidentales una vez utilizada la aguja.

Las agujas hipodérmicas se pueden clasificar atendiendo al tipo de bisel, tamaño del cono y dimensiones del tubo de la aguja (longitud y calibre).
Para los tubos metálicos (agujas, agujas de catéteres periféricos, trócares y otros objetos de punción), la escala utilizada internacionalmente se expresa en función del calibre en “Gauges” o G, por la longitud en pulgadas. Según esta escala, a menor calibre de la aguja corresponderá un mayor número de Gauges o G.
Esto se debe a que esta medida corresponde a un tubo cilíndrico de medidas determinadas que se conserva en el Museo del Louvre de modo que según el número de agujas que quepan en el cilindro, así se dice que el calibre de es aguja es de 18 G, 30 G o 22 G.

