La preparación del lecho de la herida (PLH) es un concepto dinámico que debe ser plantado desde una visión holística, un planteamiento global del paciente.
El concepto de (PLH) ha ganado reconocimiento a lo largo de los años como método para el abordaje de heridas crónicas.
Comprender la fisiología cicatricial, el microambiente de la lesión cutánea, desde la visión integral del paciente hasta la individualidad y peculiaridad de su herida, el abordaje multidisciplinar y el conocimiento del material terapéutico desarrollado para las heridas, nos permitirá tratarlas con el rigor científico que merecen, el sentido crítico que precisan y la pasión de los profesionales que día a día las atienden.
A finales del S. XX, Vincent Falanga introdujo el término preparación del lecho de la herida (PLH); la definición traducida al español sería: “el abordaje de una herida para acelerar la cicatrización endógena o para facilitar la efectividad de otras medidas terapéuticas”. El concepto de PLH ha ganado reconocimiento a lo largo de los años como método para el abordaje de heridas crónicas.
El concepto de PLH consta de 8 puntos desglosados en 15 actuaciones que conjuntamente permiten una valoración integral del paciente que padece una herida crónica.