4. TAPONAMIENTO NASAL POSTERIOR
Está indicado cuando fracasan los procedimientos anteriores (no se controlan con el taponamiento anterior), en las epistaxis muy posteriores o en las que se originan en el cavum. Es un taponamiento más agresivo, que se realiza, generalmente, en medio hospitalario por requerir anestesia o sedación.
4.1. NEUMOTAPONAMIENTO
Simple
Procedimiento:
(Rapid Rhino®), se mantiene la sonda en agua destilada durante 1 minuto, se introduce en la coana y se inyecta aire hasta comprobar el cese del sangrado en orofaringe
Bibalonada
Es la empleada en la actualidad, previa anestesia de la fosa nasal (lidocaína más adrenalina).
Procedimiento:
La sonda se introduce por el suelo de la fosa nasal sangrante. La sonda tiene 2 balones: el balón distal se llena con 10 ml de suero fisiológico, y se realiza una ligera tracción, de manera que impacte en el cavum; el balón proximal se llena con 30 ml de suero fisiológico, de manera que la fosa nasal se ocluya lo suficiente como para cohibir la hemorragia.
La técnica clásica de taponamiento posterior. Se coloca:
- En primer lugar, unas mechas con anestésico tópico en las mucosas nasal y orofaríngea.
- Se forma una torunda con una gasa, rodeada y anudada con hilo de seda del número 1, dejando dos extremos sueltos.
A este extremo oral se anuda uno de los cabos que rodean la torunda, y se procede a traccionar por el extremo nasal de la sonda, intentando introducir la torunda anudada desde la boca al cavum hasta conseguir que ésta se aplique lo más posible a las paredes de la nasocavidad.A continuación se retiran las mechas de anestesia tópica y se introduce por la fosa nasal sangrante una delgada sonda nasoesofágica, cuyo cabo distal se saca por la boca.
Finalmente se realiza un taponamiento nasal anterior en la fosa nasal correspondiente, como medida de seguridad.
Medidas de contingencias
Sonda Foley Nº 14-16.
Procedimiento;
Sonda de Foley del nº 14 o 16, Se pasa previamente a la introducción de la sonda, una seda fuerte por el ojal de su punta para que sirva de sujeción al vestíbulo nasal hasta el final del taponamiento; se introduce suavemente la sonda con el balón no hinchado por la ventana nasal correspondiente impregnada con vaselina estéril, hasta que se visualice en la orofaringe, por detrás de la úvula. Se introducen unos 10 ml de aire en el balón y entonces se retrae el catéter, de forma suave pero firme, contra la coana posterior, fijándolo al vestíbulo nasal mediante la seda fuerte, que se anuda al vestíbulo nasal sobre una gasa enrollada. Se comprueba si la presión del balón es suficiente, inflándolo lentamente, no superando en general los 10 ml y máximo hasta unos 30 ml, valorándose a la vez si existen signos de sangrado en faringe. Seguidamente, se realiza un taponamiento anterior de la fosa con gasa de bordes orillada.
