4. PRÁCTICA CLÍNICA SEGURA
Podemos considerar que una práctica clínica es segura, cuando se realiza con la “certeza” de que a lo largo de todo el proceso, se ha empleado la mejor evidencia disponible en ese momento en referencia a prevenir, minimizar y eliminar los EAs originados por dicha práctica. Por tanto, la seguridad es consecuencia de un modo de trabajar en el que la aplicación del mejor conocimiento disponible es un elemento decisivo.
Trasladar el conocimiento a la práctica clínica es un arte que requiere destrezas no sólo clínicas, sino de comunicación entre los gestores y los profesionales involucrados en su aplicación. En este sentido, es recomendable comenzar por implementar prácticas y procedimientos de seguridad caracterizados tanto por su eficacia probada como por su factibilidad técnica y organizativa, como algunas de las que se reflejan en el estudio de Shojania et al. y que deberían ser de implementación prioritaria en cualquier organización sanitaria que tuviera entre sus metas y compromisos la seguridad del paciente.

Tabla 1. Prácticas seguras con el máximo grado de evidencia
Fuente: Aibar C, García JL et al. Prácticas clínicas seguras y alertas médicas. En: Gestión sanitaria: calidad y seguridad de los pacientes. Madrid. Fundación Mapfre. 2008: 293-299.
A nivel mundial se han llevado a cabo diferentes iniciativas relativas al desarrollo de una práctica clínica segura, pero por su continuidad y especial repercusión internacional cabe destacar la propuesta del National Quality Forum (NQF) o de la Joint Commision on Acreditation of Heallthcare Organizations (JCAHO).
4.1. Listado de Prácticas Clínicas Seguras del NQF
- Crear una cultura de seguridad en las instituciones sanitarias que animen a la comunicación de amenazas para la seguridad y que se vean los EAs como una oportunidad de mejora.
- Adecuar la capacidad de los servicios a las necesidades de salud (protocolos explícitos, formación adecuada del personal, conciliación de la medicación).
- Favorecer la transmisión de la información y la comunicación (estandarizar abreviaturas, registrar las prescripciones verbales, asegurar la compresión del consentimiento informado, implementar protocolos estandarizados para evitar la cirugía del sitio erróneo).
- Generar prácticas y procedimientos específicos en determinados escenarios (administrar betabloqueantes en pacientes con riesgo de isquemia, valorar y prevenir el riesgo de ulceras por presión, evaluar y prevenir el riesgo de trombosis, evaluar y prevenir el riesgo de aspiración, utilizar barreras en la inserción de vias centrales, aplicar la adecuada profilaxis antibiótica quirúrgica o evaluar el riesgo de desnutrición al ingreso…)
- Mejorar la seguridad del medicamento (asepsia de las áreas de preparación, estandarización de procedimientos, identificación con etiquetas adecuadas, unidosis).
4.2. Áreas de interés prioritario de la JCAHO en seguridad del paciente
- Mejorar la exactitud en la identificación de los pacientes. Nunca debe ser el número de la cama.
- Mejorar la efectividad de la comunicación entre el personal sanitario.
- Mejorar la seguridad en el uso de medicamentos.
- Reducir el riesgo de infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria.
- Dar continuidad y precisión a la medicación a utilizar a lo largo del proceso.
- Prevención de caídas.
4.3. Plan de Calidad del SNS. Área de Actuación en Seguridad.
- Prevención de EAs de la anestesia en cirugía electiva.
- Prevención de fracturas de cadera en pacientes postquirúrgicos.
- Prevención de ulceras por presión en pacientes de riesgo.
- Prevención de Tromboembolismo pulmonar en pacientes sometidos a cirugía.
- Prevención de la infección nosocomial.
- Prevención de la cirugía en lugar o paciente erróneo.
- Prevención de los errores debidos a la medicación.
- Implantación y aplicación correcta del consentimiento informado y cumplimiento de las últimas voluntades.
4.4. Estrategia de seguridad del paciente del Sistema Nacional de Salud. Periodo 2015-2020.
En España, además del plan de calidad, el ministerio acaba de lanzar la estrategia de seguridad del paciente con 6 Líneas estratégicas para desarrollar durante el periodo 2015-2020, que mantienen los principios de la estrategia de seguridad del paciente ya en desarrollo, incorporando objetivos y recomendaciones nuevas:
- Línea 1: Cultura de seguridad, factores humanos, organizativos y formación.
- Línea 2: Prácticas clínicas seguras.
- Línea 3: Gestión del riesgo y sistemas de notificación y aprendizaje de incidentes.
- Línea 4: La participación de los pacientes y ciudadanos por su seguridad.
- Línea 5: Investigación en seguridad del paciente.
- Línea 6: Participación internacional.
