Tema 13. Reacciones de hipersensibilidad aguda a fármacos antineoplásicos.


4. COMPLICACIONES

La extravasación de citostáticos al espacio perivascular o subcutáneo es una complicación relacionada con la administración intravenosa de estos fármacos que se produce alrededor del 0,5-6% de los ciclos administrados.

Existen ciertos factores que aumentan el riesgo de extravasación, como el lugar de la venopunción (mayor riesgo en las zonas con escasa grada subcutánea y plieques de flexión), las características de la vena canalizada (mayor riesgo en las venas de escaso calibre, las venas esclerosadas por tratamientos previos, la flebitis), presencia de patologías que aumentan la presión venosa, como el linfedema o el síndrome de vena cava superior, y otras situaciones como neuropatías periféricas o los déficits sensitivos de la extremidad.

Pueden producirse extravasaciones a distancia en un trayecto del vaso distinto al de la administración del fármaco, pero en el que recientemente se hayan realizado extracciones sanguíneas o cateterismos. Además, se han documentado casos de aparición de signos de extravasación en el lugar donde se había producido una extravasación previa, al administrar de nuevo el mismo citostático (fenómeno de recuerdo).

Desde el punto de vista clínico, la extravasación se caracteriza por la aparición uno o varios de los siguientes síntomas locales: dolor, quemazón, prurito, tumefacción, eritema y cambios en la coloración o en la temperatura local de la piel. En ocasiones, puede ser prácticamente asintomática, y detectarse por una disminución anómala de la velocidad de infusión o la ausencia de retorno venoso. Es importante realizar un diagnóstico diferencial adecuado con la flebitis y las reacciones de hipersensibilidad.

La gravedad de las lesiones tisulares va a estar relacionada con el potencial vesicante del citostático, la cantidad y la concentración del fármaco extravasado, la localización y la respuesta de cada tejido, y con una correcta y rápida actitud terapéutica inicial.

En caso de los agentes irritantes, los síntomas suelen ser de corta duración, reversibles y no dejan secuelas a largo plazo. Sin embargo, las consecuencias de la extravasación de fármacos vesicantes pueden ser potencialmente graves e invalidantes, debido a la capacidad que tienen estas sustancias de causar ulceración local y necrosis.