3. FARMACOLOGÍA DE LA ESCLEROSIS LATERAL AMIOTRÓFICA
La esclerosis lateral amiotrófica (ELA), es un trastorno de las neuronas motoras del asta ventral de la médula espinal y las neuronas corticales que les proporcionan los impulsos aferentes. Se caracteriza por debilidad de avance rápido, atrofia, fasciculaciones musculares, espasticidad, disartria, disfagia y anormalidades respiratorias. Por lo general las facultades cognitivas y sensitivas están conservadas. Suele ser progresiva y letal con una supervivencia que por regla general no supera los tres años.
Entre las posibles causas hay alteraciones genéticas (identificadas en un 10% de los casos) pero el origen del resto es desconocido. Se ha identificado una acumulación de glutamato por una anormal recaptación lo que origina lesiones en las neuronas motoras. El único tratamiento aprobado hoy en día, el rizurol se basa en esta observación.
El Riluzol se absorbe por vía oral e inhibe la liberación de glutamato además de tener otros efectos. Tiene pocos efectos adversos y es bien tolerado. Aunque su efecto en la ELA no es muy llamativo resulta importante en el tratamiento de una enfermedad resistente a todas las terapéuticas previas.
El medicamento más útil para la terapéutica sintomática de la espasticidad en la ELA es El Baclofen que actúa como agonista GABA. Se puede administrar por vía oral o en el espacio alrededor de la médula. Otros fármacos útiles para el tratamiento de la espasticidad son: tizanidina, clonazepam, dantroleno. Aunque este último no se utiliza en la espasticidad por ELA.